Locos, asesinos, lunáticos y un largo etcétera de calificaciones insultantes como a la misma vez farsas, que tenemos que aguantar nosotros, nacionalsocialistas, solo por decir una verdad que al resto de los mortales se le esta negada por parte de los que hoy por hoy están en el trono del poder. Ya no es solo la situación de tener que hacer frente a todo un conjunto de provocaciones, pues también están las agresiones de nuestros enemigos ya sea física como verbalmente y la represión estatal.
Pues todo este ambiente de difamaciones y agresiones de diversa índole, están orquestadas por aquellos que un sus carnes sienten pavor o temor, de que nosotros, por conocimiento y causa, desenmascaremos la mascara del sistema, de derrumbar las bases donde sustentan su ignominioso poder, que les sirve, para poder cumplir, su misión a escala planetaria.
Solo los demasiados humanos, los que se dejan llevar por la manipulación y la intoxicación mental, son los seres dóciles que sirven, como meras marionetas, como autómatas programados para ser los siervos del poder del demiurgo encarnado en el sionismo. Ellos han sabido de hacer un mito, una religión de creencia universal, del tan hablado supuesto holocausto, que es donde reciben, junto con el poder del dinero, la fuerza de su poder, junto con otras formas que conforman su manipulación sobre las naciones y de los pueblos. Solo el despertar de la raza aria, puede hacer frente, a ese poder oscuro, fuerzas de las tinieblas, que con una falsedad y la maldad indecibles someten a la inmensa mayoría de la humanidad.
Pero, se tienen que valer, para la defensa de su poder, de un ejército de lacayos, empezando por el rostro visible del poder, la política de la democracia, de los sistemas judiciales y resto de órganos claves de una nación. Mediante su arma principal, la piedra angular, el poder del capital. Ellos hacen y deshacen crisis económicas y conflictos internacionales, haciendo creer a las sociedades que son culpa de sus gobernantes, pero que en la realidad es producto de un plan preconcebido, por el poder sionista.
Es despertar la mentalidad y voluntad de`personas, que quieran saber la verdad y con ella alcanzar la libertad, pero a correr el riesgo de ser un hereje contra el pensamiento único y con todo lo que pueda acarrear. O bien, ser tildado de conspiranoico o de lunático en mejor de los casos. Solo tienen que investigar unos hechos que lo apreciamos del día a día. Para poder vislumbrar una sinceridad, que esta mas allá de una apariencia que expresa la propaganda y la programación e intoxicación mental de los lacayos de los amos del mundo, el poder sionista.
. Procuremos mantener siempre nuestra voluntad, que es cumplir nuestra misión consagrados en la defensa del ideal de la memoria de la sangre, del legado ancestral, de la esencia primordial de nuestra tierra.
Por que nosotros no somos iguales que al resto de los mortales, de los demasiados humanos imbuidos en falsos ideales de falsos profetas y carcomidos por los vicios.
Nuestra existencia tiene un fin y un objetivo superior a nuestro propio ser. Nosotros sabemos de donde procedemos, hacia donde vamos, y hacia donde tenemos que avanzar.
Sabemos desenmascarar a los farsantes y traidores y cuales son nuestros enemigos. Sabemos de principio y final cual es la rima y partitura de nuestras acciones, obras y pensamientos.
Hemos sabido escoger el camino del combate, pues entendemos la vida como un eterno y continuo batallar.
Pero no somos simples guerreros, no. Somos la continuidad de una tradición ancestral guerrera que se pierde en la noche de los tiempos. Por eso somos tan diferentes al resto de las personas, por que nosotros sabemos apreciar el sentir de ciertos valores como el honor, la lealtad, la justicia y la verdad. Mientras que ellos se jactan de querer y tener una vida llena de placeres, de comodidades y alegrías. Su preludio de sinuosa fantasía esta abocada a caer por el abismo del vacío. Pues es a si sus vidas no tienen un significado superior y heroico de la vida. Su veneno es el valor del oro, del dinero, del lucro, sin importarles tan si quiera, su tierra, su historia, sus señas de identidad, todo desolación en su derredor.
Por ello, nosotros imperturbables pase lo que pase, a través del tiempo, mas allá de lo mortal, sabemos, cuando debemos de actuar, somos inmortales, por que hemos despertado en nuestra alma el sentido y sentimiento de la memoria de la sangre. Por ello tenemos retazos de recuerdos de otras vidas ya vividas en nuestra mente, como sentimos latir con fuerza el corazón cuando apreciamos un hecho heroico, cuando vemos los vestigios de nuestra historia en los monumentos, y en el regazo puro de la naturaleza. Por ello, no somos iguales que ellos. Hemos sido elegidos, para continuar el combate que nuestros antepasados nos precedieron,
Por que sentimos la nostalgia hiperbórea, de una edad dorada, superior a este sub.-mundo y su tiempo. Por que no reconocemos más leyes que la ley del honor y la espada. Por ello, mis hermanos de armas, estad preparados y tened prestas las armas, por que tarde o temprano, la batalla contra el veneno del demiurgo puede venir, en cualquier lugar, momento y forma. Estaremos siempre en alerta y en vigilia constante, hasta entonces preparémonos para esa lid.
No obstante, debemos de ser constantes y tenaces en la medida de que vayamos avanzando por los senderos de este ignominioso mundo y su tiempo. Nuestros enemigos intentaran combatirnos con malas artes y con modos de la más vil ciencia, intentaran desorientarnos con oscuras insinuaciones, con su mordaz veneno. También tendremos que hacer frente la incomprensión de nuestros seres queridos, de personas conocidas de dispar ambiente`.
Debemos de cuidarnos de las farsas apariencias y de los ardides engañosos, estaremos solos contra todo y contra todos. Templar con fuego nuestras almas y corazones, como el mejor acero de una espada. Seremos fuertes en mente, espíritu y cuerpo.
Por hemos de saber que la mejor alegría es el merito del sacrificio y la mayor felicidad es de haber conseguido la victoria.
“Los que con tanto entusiasmo luchan contra nosotros, con igual entusiasmo forjan las cadenas de su esclavitud”
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